La Ley 25.779, aprobada el 21 de agosto de 2003 y reglamentada el 2 de septiembre, significó una fuerte señal política para que la justicia comenzara a reabrir las causas por los delitos cometidos en la Argentina por la última Dictadura Cívico – Militar contra los Derechos Humanos, que permanecían clausuradas hasta entonces.

En esas jornadas históricas, el Poder Legislativo consideró “insanablemente nulas” las leyes 23.492 y 23.521 (Dictadas por los gobiernos de Raúl Alfonsín y Carlos Menem) que frenaron las incipientes investigaciones en la vuelta de la democracia. El momento para que eso sucediera fue fundamental: luego de 20 años de democracia se habían creado las condiciones sociales, políticas y jurídicas para empezar a dar vuelta a la impunidad reinante.

La Facultad de Psicología de la Universidad Nacional de Mar del Plata se complace en poder celebrar este aniversario; que no es otro que el de la concreción de las herramientas que nos permiten plasmar en hechos jurídicos, políticos e históricos aquello que de ser una consigna, ha pasado a ser, con la mencionada derogación, un imperativo ético de la mayoría de nuestra sociedad: Memoria, Verdad y Justicia.

Mar del Plata; 21 de Agosto de 2013.-